Esta semana he recordado cuando de alumno de la antigua EGB me pedían realizar una redacción de 500 palabras sobre un tema en concreto. O cuando en el bachillerato te mandaban una serie de libros de lectura obligatoria. Como siempre, generalizar no es correcto y tendremos alumn@s y alumn@s, pero por norma general y ya no sólo en alumnos sino también en nosotros los docentes, encontramos hoy en día una tendencia a lo breve, no solo en la escritura sino también en la lectura. No puedo estar más de acuerdo con Baltasar Gracián y su célebre cita: "Lo bueno, si breve, dos veces bueno, y aún lo malo, si breve, no tan malo.", pero ello no quita que hay ocasiones en las que un disertación sobre una idea requiera de varias páginas, o que un buen relato se convierta en un copioso libro.
Os lo ejemplificaré con un par de hechos observados en mis alumnos esta misma semana sobre el tema. Hablando con un grupo de alumnos sobre las nuevas tendencias entre la gente de su edad (14-16 años) en la red, me comentan que se está poniendo de moda la web Asco de vida. Vaya perla, pensé yo al ver en que consiste tal web. Pero bueno, mejor eso que las tendencias de hace unos años con Vota mi cuerpo, etc., al menos en ésta si miramos su parte positiva, sirve para que puedan expresarse, quejarse, manifestarse e imagino que sentirse algo mejor. En tal página, los usuarios redactan microrelatos en plan queja, anécdota, noticia, ironía, etc. Pues bien, la alumna que me lo mostraba, a la primera de cambio me dice: “Yo las que tienen tres líneas o más, paso de leerlas, que rolleras, seguro que son un rollo”. A que extremo hemos llegado, que ya raqueamos hasta en el número de palabras que leemos por gusto o diversión, ya no digo por obligación.
Por otro lado, en el trabajo de la redacción de una noticia periodística que estoy realizando con mis alumnos, les pido que realicen un trabajo de investigación periodística recurriendo a fuentes de la red, pero que a la hora de redactar sus textos no pueden exceder de las 1500 palabras. La pregunta, rápidamente (imagino que ya la habéis intuido) fue: “Y el mínimo, ¿en cuanto está?”. Pues bien, están redactando sus artículos y es triste comprobar como se van al menú herramientas del procesador de textos para contar cada dos líneas que escriben cuantas palabras llevan, o como sin importarles que puedan tener mejor o peor nota (la nota, claro, como no) te dicen cuando llevan 200 o 300 palabras, que ya no se les ocurre que escribir.
Pero como comentaba al principio, no sólo lo hacen nuestros alumnos, es un problema que está ahí y que cada vez somos más los que hacemos uso de estas tretas con la finalidad de escapar.
Profundizando en la cuestión, quiero intuir varias razones por las que llegamos a esta situación. Una evidentemente está en mi tan nombrada infoxicación. Ante tanta saturación de información, tendemos a huir, a resolver tan delicada situación por el camino más corto. Buscamos lo breve, necesitamos tiempo para otras lecturas u ocupaciones y procedemos a leer en diagonal, a saltarnos párrafos, a buscar directamente el final del relato o escrito en busca de una conclusión que nos ahorre la lectura de todo el documento. Lo mismo tendemos a hacer con aquello que escribimos, sobretodo si es por obligación más que por devoción, acortamos nuestros escritos, huimos de dejar fluir en nosotros las palabras, expresando todo lo que tenemos dentro. ¿Qué hacemos pues?
Bien, sin ir más lejos ni poner a otros de ejemplo, hablando de blogs sobre educación y TIC hay un montón (este es uno más de ellos), y muchos de ellos muy buenos (no es éste el caso ;-), y estamos (los interesados en el tema) llegando a un punto en el que leer lo que en ellos se publica y realizar todas las otras tareas que tenemos, se convierte en un imposible.
http://www.flickr.com/photos/sono/355132290 |
Así pues la solución no está en querer leerlos todos, aunque sea mal, en diagonal, las dos últimas líneas de cada uno, etc. La solución pasa por dosificar y seleccionar, escoger de entre todos ellos, aquellos que consideremos más válidos, o aquellos que alguien que conocemos nos ha recomendado que leamos. Por otro lado, no soy partidario de limitar la creatividad de nadie obligándole a redactar posts más cortos, cada cual es libre de utilizar las palabras que necesite para expresarse, pero tanto en un blog como en una web, o por no decir en la mayoría de los recursos que nos ofrece la red, si confeccionamos artículos más cortos, hay más posibilidades de que te lean y de que lo hagan a gusto, y se dejan las disertaciones más largas para otro tipo de recursos (libros, comunicaciones, pdfs, etc.), que quien siga interesado en ellos ya los buscará. O no os ha pasado ver con una cara diferente aquella web en la que tienes que bajar mucho la barra de desplazamiento de aquella otra que con un simple pantallazo tienes una visión general de toda ella. O no te ha pasado que has ido a un blog y cuando has visto el post que vas a leer, lo primero que haces es mirar a ver como de largo es, es decir, cuanto tienes que bajar la barra de desplazamiento.
Yo prometo, realizar los posts más cortos, pero no lo haré si con ello mermo la calidad de lo que quiero decir. Insisto, escribo porqué quiero y me hace feliz, y cada uno es libre de leerme o no leerme, de que le guste o no, pero prefiero que libremente escoja si leerme o no leerme, y sí lo hace que lo haga de principio a fin, porqué al final, igual no encuentra la conclusión, sino una tontería como la de decir que este post está escrito sin contar su título con unas, exactamente, 1000 sinceras palabras.
Debo ser de la vieja escuela, a mí no me importa que un artículo sea extenso si es interesante. Creo que depende más de la calidad y de la capacidad de conectar con lo que en ese momento me interesa que con el número de palabras. También para los alumnos: aunque pueden buscar el menor número de líneas, si algo les interesa son capaces de leer y leer, o escuchar y escuchar.
ResponderEliminarEspero que no nos escatimes tus palabras, Juanfra, siempre es un placer leerte.
A mi lo que me sugiere el post son dos cosas que me traen de cabeza sobre nuestros alumn@s:
ResponderEliminar1) Que cuando buscan información por internet sólo miran los 2 ó 3 primeros resultados y por supuesto de la primera página de 10 resultados mostrados (creo que no saben que existen más resultados :-P)
2) Que cuando buscan información lo hacen de forma "LITERAL"
Me explico:
cuando les pido que busquen información en Internet sobre algún tema lo primero es copiar la frase que digo yo para que realicen la búsqueda de forma "LITERAL". La ponen en el buscador (normalmente google), incluso con los interrogantes o signos de puntuación: comas, puntos y seguidos, etc (es que son tan aplicados!!!). Luego leen "en diagonal" o no se cómo los 2 ó 3 primeros resultados y si pinchan en los enlaces y han de bajar mucho con la barra de scroll dicen a grito "pelao": "No he encontrado nada" o "No hay nada en Internet sobre ese tema".
Me estoy replanteando el dar un Tema 0 al inicio de cada curso y/o trimestre sobre: "Aprender a buscar información en internet y aprender a LEER los resultados".
Es una espinita que llevo clavada :-(
PD: Por cierto, es verdad que "ascodevida" se está poniendo de moda :_(
Contestando...
ResponderEliminarAna:
Con una profesora como tú (y perdona que te tutee), no me extraña nada que tus alumnos lean y lean y sean capaces de redactar libros enteros aunque tú no lo pidas. Efectivamente, les tiene que interesar, y para ello no hay nada mejor que la motivación, y ahí es donde los docentes jugamos un papel esencial. Y estoy convencido que eso lo haces magistralmente. Ya me enseñarás.
Por mis posts no te preocupes, sigo pensando que gastaré todas las palabras que necesite para expresar lo que siento, mis reflexiones, mis preocupaciones, etc.
Y el placer es mio por contar contigo, con tu sabiduría, tu buen hacer y tus excelentes comentarios de los que siempre aprendo. Gracias por seguirme y comentarme. Diría, que no hace ni una hora que he publicado un post, y ya has pasado y lo has leído.
Muchísimas gracias.
Contestando...
ResponderEliminarDani (@dapaspei):
Efectivamente Dani. El problema está en que nadie ha enseñado a nuestros alumnos a realizar búsquedas eficaces en Internet para escapar de las garras de la infoxicación. De eso te puedo hablar un poco y pasar una experiencia que realicé con mis alumnos y que desde entonces se ha convertido en "Tema 0" como tu dices, de todos los cursos. Porqué es tarea nuestra como docentes enseñarles esa habilidad, esas destrezas, para que puedan adquirir competencia de tratamiento de la información y competencia digital.
Gracias por el comentario, gracias por pasarte por aquí, y gracias por estar ahí. Un abrazo.